El empleo amigo en España

El pasado enero, el Instituto Nacional de Estadística de España (INE) señalaba en su Encuesta de Población Activa (EPA), que la tasa de desempleo registrada en el último trimestre del 2016 era del 18,63 %, pero si uno analiza los datos algo que se podrá encontrar entre los resultados de los desempleados es, el método utilizado. ¿Cómo se busca el empleo en España? ¿Qué tan efectivo es el medio de búsqueda para encontrar empleo? Encontramos alguna respuesta para el empleo: la mano de un “amigo”.  

Los resultados del INE sobre el año 2016 respecto a la forma de búsqueda de empleo por los “parados” destaca, en primer lugar, el de “A través de amigos, parientes o un sindicato” con un  83 % seguido de una solicitud directa a un empresario o presentando su CV. Esto nos da una ligera pista sobre hacia dónde se acude en primer lugar a la hora de buscar un trabajo. 

El CIS en su encuesta del mes de febrero de 2016 realizó la pregunta ¿A través de qué medios está buscando empleo? (pregunta 59e), donde la respuesta mayor fue “A través de amigos/as”, seguido “A través de internet” y “A través de conocidos/as”; en esta misma encuesta se intentó conocer cómo fue que obtuvieron su empleo y se realizó la siguiente pregunta ¿Cómo consiguió Ud. su actual trabajo? (pregunta 59b), la respuesta que mayor puntuación tuvo fue la de “A través de un familiar directo” seguido por la opción de “A través de amigos/as” y en quinta posición “A través de conocidos/as” (ver imagen).  

Si agrupamos de forma ordenada a las opciones que han priorizado a todos sus contactos personales (familia, amigos, conocidos, empresa familiar, etc.) esto reflejaría que de cada 100 empleos conseguidos, 44 aproximadamente se debieron gracias a sus contactos personales. 

Fuente: Elaboración propia con datos de la encuesta del CIS - Febrero 2016

El Observatorio de Empleabilidad y Empleo de los Universitarios en su Barómetro 2015 señaló que, la forma más habitual de buscar empleo por los egresados universitarios es a través de “contactos personales” seguido por los portales de empleo y en tercer lugar, la autopresentación y contacto directo entre otras; pero lo que resalta en este informe es que la efectividad de los métodos utilizados para encontrar un empleo reside en tener contactos personales. Casi cada ocho de cada diez universitarios que encontraron empleo lo hicieron gracias a sus contactos personales mientras que solo cuatro de los que utilizaron la segunda opción de búsqueda – portales de empleo – les fue efectivo este método para trabajar. El segundo lugar fue para la autopresentación y contacto directo con siete de cada diez universitarios que encontraron empleo, y ¿para los servicios públicos de empleo? Solo fueron tres según el informe.

Fuente: Barómetro del OEEU 2015

Los servicios públicos de empleo parecen tener menos protagonismo en el apoyo a la obtención de un empleo y la línea seguida se reduce principalmente a políticas pasivas como prestaciones o subsidios que no han logrado paliar el tremendo desequilibrio en el  mercado laboral.

Ya con materia prima (datos duros) nos damos una idea preliminar para la acción. La elaboración de las políticas públicas enfocadas al desempleo deben ser adaptadas al actual contexto laboral, su orientación y en su caso ajuste, precisa de dirigirlas hacia políticas activas que permitan la inserción efectiva de los desempleados en el mercado de trabajo; políticas activas no solo en un plano negativo (como las de tipo restrictivo respecto a los criterios de elegibilidad) sino activas positivas como por ejemplo, la institucionalización de herramientas como el Networking, en el que profesionales de distintos ámbitos así como de distintos sectores económicos, puedan enlazarse y al mismo tiempo, ampliar sus redes de contacto debido a que como hemos observado, el carecer de contactos personales puede constituir un obstáculo a la hora de acceder a un puesto de trabajo.

Si Adam Smith señalaba la función de una “mano invisible” para referirse a la autorregulación del mercado en el Siglo XVIII, ahora nosotros podremos hablar de la “mano invisible de un amigo” (hacemos uso de esta metáfora) para la situación individual de acceso al empleo.